Después de dos divorcios deje de creer en los hombres pero para mi son un mal necesario. A pesar de poner todo mi empeño el lesbianismo no es para mí, y es que los hombres me gustan demasiado. Así que sabiendo que hay muchos hombres disponibles me dedique a cazar a aquellos que no quisieran relaciones amorosas, solo sexo. Para esto me hice de dos amigas que se convirtieron en mis compinches. Con ellas competíamos sanamente en todo (el mas lindo, el mas joven, el mas viejo, etc.).
Una vez hablando entre nosotras una de ellas comento de cuando estuvo en la capital para el casamiento de una prima. En la despedida de soltera fueron a un boliche de esos donde los hombres se desnudan y allí algunas (las mas intimas de la novia) juntaron el dinero para que uno de estos muchachos hiciera un trabajo mas personal. En el departamento de una de ellas el muchacho se despacho a la novia, a una tía a mi amiga y a la mejor amiga de la novia. Nos quedamos admiradas de lo que un hombre puede hacer si se le paga. Pero en nuestro pueblo eso no existe.
Unos meses después tuve que ir a la capital por razón de mi trabajo. Los primeros días lo pase muy ocupada pero luego tuve más tiempo libre y mi cuerpo empezó a pedir a gritos la presencia de un hombre. Estaba sola en una ciudad grande sin mis amigas cerca así que me anime compre un diario y busque en el rubro 59 allí encontré el aviso de un tal Pablo que tenia la delicadeza de no mencionar sus medidas y decía que atendía solo mujeres (no quería nadie raro) lo llame y lo cite en el lobby del hotel donde me alojaba. A la hora apareció un muchacho lindo pelo castaño de 1,85 de altura a pesar de usar ropa suelta se notaba que estaba espectacular.
Arreglamos rápidamente el tipo de servicio que quería y nos fuimos a un hotel por horas. Allí el me hizo sentar en la cama y fue desvistiéndose al ritmo de una música imaginaria hasta quedar solo con un slip que apenas atrapaba su masculinidad me tendió la mano, me ayudo a pararme y lentamente me fue desvistiendo hasta sacarme todo luego me senté en la cama y me invito a ser yo quien le sacara el slip. Lo baje lentamente y saque a pocos centímetros de mi cara una de las pijas mas lindas que he visto, grande, sólida como la roca y sin la piel que cubre el prepucio me encanto y me dio unas ganas terribles de chuparla pero como era yo quien pagaba decidí que el debía ser quien me diera placer a mi así que le pedí que se arrodillara y le tome del cuello suavemente y le lleve su cabeza hasta mi pubis y una vez que entendió lo deje hacer.
A pesar de que deje su lengua cerca de mi sexo el decidió recorrer toda la zona donde mas me gusto fue cuando paso la lengua por la cara interna de mis muslos pero yo estaba muy caliente y no necesitaba tantos mimos pero como estaba en manos de un profesional me deje llevar. Después de muchos besos y caricias estaba por pedirle que de una vez me chupara la concha por que estaba desesperada pero parece que se dio cuenta y me dio un largo lengüetazo que fue casi desde mi ano hasta mi ya sensible clítoris me tomo de sorpresa y me quito el aliento lo hizo 3 veces mas y luego le dedico toda su atención a mi clítoris.
Los días sin sexo y lo bien que este muchacho trabajaba me hicieron tener un orgasmo espectacular que comenzó como una mecha que se enciende en mi entrepierna y sube por la columna hasta estallar en mi cabeza fue hasta hoy el mejor orgasmo que he tenido. El lejos de darse por satisfecho comenzó a tratar de meter su lengua en mi concha mientras la movía dentro de mí y luego ataco de nuevo mi clítoris que placer. Y no soltó hasta darme otros dos orgasmos y fue por que le pedí que me diera un respiro, mientras yo recuperaba el aire el se acostó a mi lado luego hablamos un poco y me pregunto si quería un masaje que acepte y me di vuelta.
Si su lengua era mágica sus manos no se quedaban atrás me dejo como nueva y mientras lo hacia me pregunto si quería el masaje especial, le pregunte que tenia de especial a lo que respondió que era una sorpresa acepte también.
El empezó a recorrer su lengua por mi espalda y seguía por mi columna hasta casi llegar a mi cola luego beso mis nalgas como si las mordiera con los labios eso me puso muy hot otra vez. Sus caricias se acercaban cada vez mas a mi prieto culito y cuando llego allí casi de muero que placer, esa lengua jugaba en la puerta de mi culito se movía en círculos trataba de entrar era maravilloso, como trabaja este muchacho pero eso aunque me gusta mucho no me hace terminar así que le iba a pedir que me penetrara pero me acorde que este muchacho estaba muy bien dotado y prefería seguir con mi culo sano ya que mi culito esta reservado para los de pene chico. Pero esa lengua estaba volviéndome loca así le pedí por fin que me la pusiera con mucho cuidado. El así lo hizo pero no resistí ni la mitad, así que le pedí que me dejara me di vuelta y vi que se había puesto un preservativo cosa que yo en mi calentura olvide.
Abrí mis piernas y lo invite a entrar por mi concha, a pesar de estar muy mojada fueron necesarios tres estocadas para tener todo eso adentro el apoyo el peso de su cuerpo sobre sus brazos haciendo que solo nuestras pelvis se mantuvieran en contacto y comenzó a moverse lentamente pero saliendo casi hasta el final y luego empujando hasta el fondo, esa amplitud de movimiento me encantaba y fue acelerando de apoco hasta que el ritmo se volvió frenético y yo tenia un orgasmo tras otro y el no paraba un minuto como si fuera un terminador dispuesto a matarme de placer, cuando ya no pude mas le pedí que saliera y el obedeció. Luego de tomar un poco de aire y recuperarme le pregunte si el nunca terminaba a lo que el respondió que eso ya era otro precio y me explico que algunas mujeres pagan mucho mas solo por el placer de sentir su eyaculacion y que incluso una mujer adinerada le pagaba mucho por chuparle la pija y terminar en su boca. Nunca lo entenderé si pagas vos debes recibir placer no darlo aunque reconozco que chupar una buena pija también es placentero para mi.
Como me gustan las apuestas le propuse un juego si yo ganaba el me devolvería el dinero que le pague y si el ganaba yo le daba el doble y la apuesta era que en el tiempo que nos quedaba yo lograría hacerlo terminar. Muy seguro de si aceptó pero puso como condición que no podría hacerlo con la mano. Me monte sobre el y comencé a cabalgarlo usando todos mis trucos había aprendido como mover mis músculos para causar la sensación de que te están exprimiendo, me moví suave luego fuerte subí y baje como loca pero no lograba sacarle ni un quejido el seguía así con esa cara que nada decía, evidentemente estaba resistiendo. Mientras así me encontraba cabalgando esa pija y me acorde de un ex amante que tuve al principio gozábamos mucho los dos pero cuando hubo mas confianza entre nosotros el comenzó a terminar muy rápido luego descubrimos que era muy sensible y la única forma de evitar terminar muy rápido era usando unos preservativos muy gruesos que el llamaba rueda de camión. Pare y le dije que no era justo por que sospechaba que su preservativo lo protegía a lo que el dijo que no se lo sacaría y que yo había aceptado eso. Entonces le pregunte ¿Como hacia con la vieja rica que le tomaba la leche? y el respondió que si se la chupan a el es la única forma que lo hace sin preservativo, y dije que quería chupársela si el se sacaba el preservativo. Acepto y cuan do vi ese pedazo de hule parecía efectivamente la rueda de un camión por lo grueso.
Me arrodillé y comencé mi mamada primero recorrí todo el largo con mi lengua humedeciendo bien lo que me iba a tragar luego jugué con su glande haciendo círculos y solo eso me pareció que la puso mas dura entonces hice mi cosa favorita que abrir grande y tragar lo mas que pueda tratando de no atragantarme cerrar mis labios y salir chupando fuerte hasta terminar en la cabeza de la pija, esto hizo que soltara un suspiro sin sacármela de la boca abrí los ojos para ver si el suspiro era de aburrimiento o de placer y me alegre al ver que estaba gozando así que seguí con mi técnica hasta que esa pija se puso muy dura y caliente el glande brillaba por mi saliva y por lo hinchado que estaba. Incremente la fuerza y la velocidad y el pareció entregarse al placer por que ya gemía sin reparos y movía su cadera como si quisiera penetrar mi boca hasta que ya no pudo mas y sentí que un chorro de leche caliente chocaba en mi garganta entonces me quede quieta y deje que el terminara con violentos espasmos y un grito muy fuerte. Una vez echo esto me salí y abrí la boca en frente de el para que viera la leche que me había dejado ahí.
Me sentí victoriosa pero también culpable así que le deje el dinero y me fui.
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